Imaginese qué susto si un día va usted tranquilamente circulando por una carretera junto al mas y empieza a subir la marea hasta hacerla desaparecer y le deja a usted con su cohce en medio de las olas. Bueno, pues esto puede ocurrirle perfectamente si no tiene cuidado al cruzar entre el pueblo de Vedsted y la isla de Mando, en Dinamarca, a través de la carretera que los une, que es sin duda una de las más singulares de toda Europa.
Mando es una islita de quince kilómetros, la mayor parte de ellos arrebatados al mar, dedicada fundamentalmente a la agricultura. En ella viven 150 personas que se protegen de lo envites del mar del Norte por medio de los diques: uno, construido en los años cuarenta y destinado a restguardar los campos, y otro interior de seguridad, orientando a defen der las casa en caso ........
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